domingo, 13 de octubre de 2013

De cuando la musa despertó / El reinicio.

Alguien apareció en mi vida recientemente... no, mejor dicho yo lo llamé y su presencia desató emociones que creía ya no tenía capacidad de sentir. Él no es "the one" de hecho es la persona "equivocada". Se trató de esos breves pero fantásticos tropiezos que sabes no pasarán de un instante y sin embargo... generan todo esto, en principio una carta que jamás llegó a su destino:

24 de agosto de 2013

El cursor tintinea, sigue tintineando… hago muchas pausas…
Las emociones “molestan” a la razón. Y de hecho fue aquel terrible divorcio entre mis emociones y mi razón lo que me llevó a terapia en primer lugar. Y me di cuenta que a) el miedo sólo sirve cuándo tu vida genuinamente está en peligro y además si es en demasía puede paralizarte en lugar de empoderarte; y b) que ese pleito entre la cabeza y el corazón podía tomar una tregua y es una tregua de momento a momento.

La negación/supresión de mis emociones y necesidades más humanas y de aquellas que duelen, pero nos forjan, me llevó a manejar un grado de neurosis superlativo lleno de angustia, temor, dolor…

Me había armado una armadura tan rígida, tan  oscura, tan incongruente… Y todo por perseguir un “deber ser” y un “no quiero sentir nada más que “comodidad”. Tenía la constante sensación de estar apunto de morir si no encontraba un refugio, YA. En serio, comencé a tener nuevamente aquellos pensamientos suicidas de épocas mucho más jóvenes… temí por mi vida, por eso me tomé muy en serio eso de aliviarme.

Todo lo que hice funcionó: Terapia, experiencia dolorosa de desapego, disciplina de ejercicio, tomar acción creativa, repetición de mantras del “aquí y el ahora” para salir de la prisión que yo misma me había creado –pues soy cuerpo, y sin cuerpo no soy – y expandirme cual extensa soy no matter if u like it or not, brothas and sistas…- Fue entonces cuando Venus nació en mí y Venus tiene voz de África…

La razón por la cual te escribo todo esto… Porque me importas y me interesas, y al igual que tú, disfruto de la paz de la pausa que proporcionan las letras. Aunque te confieso que no sé qué estoy haciendo al no sólo escribirlo sino compartírtelo…. Pero en realidad no he sabido lo que “estoy haciendo” desde el momento en que decidí escribirte por primera vez. Sólo siento un enorme y estimulante deseo de arriesgarme... Yo creo que en esta ocasión tú eres el maestro y yo la alumna que quiere aplicar ciertos aprendizajes. Experimentación en campo pero no sólo sobre una sexualidad corpórea, sino también de goce intelectual… también le gustas a mi cabeza loca.

Me identifico mucho con lo que escribes en tu blog “Febrilidades”, quizá por eso es el que más me gusta y eso me permite conocerte un poco más… y creo que , este texto escrito inspirado por ti es para que me conozcas más – si es que, después de echarte esto estás interesado en ello –

Antes de comenzar con el rollo emocional – Sí, hasta ahora mi razón ha seguido manejando el camión PERO mi cerebro está dos tres hundido en un asombroso cocktail de: oxitocina, dopamina, finilananina, endorfinas, epinefrina Y adrenalina. Que sí, sí me altera la percepción- Entonces, antes quiero decirte:

1.- No genero expectativas ni escenarios a futuro de nada con esto. Las expectativas matarían lo fantástico de toda la experiencia.

2.- Estoy momento a momento consciente del apego y en cuánto los viejos patrones empiezan a aparecer, detener el proceso y soltar. (tal cual adicto que quiere una vida sin drogas/alcohol con todo su ser). 

3.- Observo que de tu parte no hay acciones que comuniquen demasiado afecto, o  que puedan llegar a entenderse como promesas u otras intenciones más allá de una amistad con intensos encuentros casuales. (no me mandas flores, no me llamas para saber “cómo estoy”, no me mandas rolas melcochonas por correo, o Facebook… etc..) entonces,

4.- En ningún momento he sentido que hay algún refuerzo de tu parte hacia mis sentimientos, con lo cual  se afirma que la responsabilidad de los mismos es sólo mía y que son naturales y perfectamente normales en una mujer, de cualquier edad.

5.- Ya encontré y tengo el antídoto para el “corazón-roto”: desapego.

6.- Las emociones y lo sentimientos SUCEDEN, no se eligen. Lo que se elige es la respuesta a ellos, la acción que tomaré tras su “suceder”.

La acción que tomé fue hacerte partícipe principal de ellos (Como buena “showperson” que soy). Aún no sé si publicaré esto algún día… pero me gusta a veces tener audiencia de sólo uno ;).

Comienza culturalmente “fuerte” lo siento, pero no me gusta “sugar-coating” stuff. Así que ahí te va y te recomiendo seguir leyendo porque al final, tú decidirás qué hacer con este texto, tú lo interpretarás según tu química, paradigmas, ideologías, aprendizajes, genética… etc… Y te sabes libre, Yo me sé libre y ahora en este momento de mi vida no tengo miedo a admitir lo que me pasa y cómo no tengo expectativas ni escenarios contigo, puedo decir en toda libertad, responsabilizándome totalmente de mis palabras:

-       Estoy enamorada de ti. – cómo lo estarán seguramente muchas otras tantas ;) –
-       ..pero no estoy  “en la pendeja” por ti; ya crecí y viví un poquito como para notar la diferencia.

Reconozco el sentimiento porque me conozco.  Sucedió en algún punto de esa noche pero no puedo estar clara en qué momento. 

Así que my darling, como eso de “no quiero sentir” ya no me sirve, pues entonces me apropio de mi “sentir”, y me responsabilizo del mismo.
Quiero primero que nada mantenerlo libre y sin apegos, por eso jamás te pediría que no te fueras o que volvieras; y tampoco quiero decirte o sentir algo como “te echo de menos” además de que sé que si pienso en ti y escucho algún ritmo guapachoso bailador, ahí estarás, porque “sólo existes en mi cabeza”; no tengo forma fehaciente de comprobar que existes en un plano distinto a ese… That’s fucking reality. 

El enamoramiento, no es más que esa serie de hormonas que cité anteriormente.  Y esto no dura para siempre, cuando mucho 3 años. Así que por ese lado estoy tranquila que tiene una “expiration date”. Además, no nos veremos en “quién sabe cuánto tiempo” y la realidad más extrema pero así es genuinamente: no tenemos certeza de que nos volveremos a encontrar, es un volado… 

Me gusta estar enamorada de tí… así como estoy enamorada de la música, el mar, las percusiones africanas y de Barcelona. Tienes algo mágico y poético Damián O’Farrill, y pues… sucede cuando sucede, uno no elige racionalmente con quién… Tú me transportaste por todos los estados físicos y en serio que aunque la experiencia sexual fue tremendamente buena, toda esa noche fue estupenda, la plática, la química, las miradas… sobre todo las miradas… seguramente fue ahí dónde me empecé a enamorar.

Tengo una pregunta que hacerte, ¿Mis besos a qué te supieron? ¿A mentira o a verdad? Yo sé que te besé con verdad fue algo que disfruté mucho hacer… yo los sentí cómo besos de fuego, no sé tu. Al menos mis labios sí que se encendieron. Además existe un grado de aprecio y estima genuinos. You got a good heart. I can tell good hearts.

No espero de tu parte un sentimiento de correspondencia, o siquiera una respuesta. Cero expectativas, means fucking Zero!

No espero que “seamos una pareja” algún día. Si la idea se me ocurre la espantaré en cuánto suceda, pues es algo a lo que mi corazón genuinamente en este momento dice NO, además las circunstancias no están como para. Yo tan sólo dejaré fluir y pasará lo que tenga que pasar cuándo pase si es que pasa… y cada quién hará y deshará de su vida por su cuenta, cumplirá sueños, desafiará límites… y en mi caso, teniendo muy presente buscar tener otro encuentro más por el tiempo que quiera continuar buscándolo.


Mi esperanza es no haber arruinado con esta confesión la posibilidad de un futuro nuevo encuentro.

Te mando un beso – muy bien dado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario